Homenaje al ingeniero Guido Di Tella
4 de enero de 2002
79ª Reunión – 28ª Sesión ordinaria
Diario de Sesiones – Páginas 6637 y 6638
Sr. Menem. — Señor presidente: quiero decir algunas palabras para adherir al homenaje al ingeniero Guido Di Tella, quien fuera Ministro de Relaciones Exteriores durante el Gobierno del Presidente Carlos Menem.
Más allá de pertenecer al mismo partido político y de haber estado en el mismo gobierno, muchas veces he discrepado en cuestiones de política internacional con algunas posiciones de Guido Di Tella, que son públicas y conocidas. Así, en las reuniones de gabinete del Gobierno Nacional en las que participaba como Presidente Provisional del Senado, algunas veces tuvimos discrepancias sobre aspectos puntuales de la política exterior de nuestro país. Pero de lo que puedo dar fe es que, más allá de esas diferencias Guido Di Tella actuó siempre en defensa de los intereses nacionales, en lo cual coincidíamos totalmente.
A su vez, quisiera mencionar que fue de los cancilleres que más años permaneció en la función y tuvo logros destacadísimos en ella. El señor senador por Buenos Aires doctor Alfonsín ya mencionó lo atinente a la culminación de todos los conflictos limítrofes con Chile. Cuando él asumió sus funciones, durante la Presidencia del doctor Menem, había veinticuatro conflictos limítrofes, los cuales fueron resueltos en su totalidad. Fue un activo promotor de las relaciones bilaterales que hoy existen con el país hermano, siendo las más intensas y solidarias de nuestra historia común.
Guido Di Tella fue también uno de los promotores de los espacios integrados como el Mercosur. En 1991, luego de ser ministro de Defensa y embajador ante los Estados Unidos, asumió su cargo y su labor fue realmente excepcional. Además impulsó el Mercosur, siguiendo una idea madre que había lanzado desde su gobierno el doctor Raúl Alfonsín en la relación bilateral con el Brasil.
Fue promotor de casi todos los Tratados en materia de no proliferación nuclear —muchas veces no comprendidos y que después, a la distancia, como ocurre con tantas cosas, se entienden—, así como de la participación argentina en las operaciones de paz de las Naciones Unidas, y de la creación del cuerpo de Cascos Blancos que luego fuera aprobado por la Asamblea de las Naciones Unidas.
Guido Di Tella fue un digno representante de la República Argentina, siendo reconocido en todos los foros internacionales. En consecuencia, considero que es muy justo que se le rinda este homenaje.
Para finalizar, quiero dejar expresado que considero que la injusta persecución judicial de la que fue objeto, como consecuencia de intereses espurios que nada tienen que ver con la administración de Justicia, seguramente han influido para precipitar su muerte.
Por sobre todas las cosas, Guido Di Tella sirvió a la Patria como el mejor y creo que es justo que hoy este cuerpo le rinda este merecido homenaje. (Aplausos)